El entorno es encantador, con vistas impresionantes desde mi habitación. El desayuno fue excepcional, con una amplia variedad de quesos, embutidos y frutas frescas. El personal fue atento y amable, y el restaurante tenía una terraza cubierto de glicinas que seguramente es preciosa en primavera. Además, el jardín es un oasis que invita a relajarse. Definitivamente un lugar para disfrutar de la belleza del pueblo.

El wifi no funcionó en la habitación, sólo estaba disponible en las áreas comunes.

La ubicación es inmejorable, justo en el centro del encantador pueblo y cerca de la catedral, lo que me permitió explorar a pie y disfrutar de las pintorescas calles medievales. Las vistas desde mi habitación eran impresionantes, y también valoré la disponibilidad de agua embotellada y un ventilador para contrarrestar el calor.

El acceso al hotel puede ser complicado debido a las escaleras que hay hasta la recepción.

la terraza del restaurante tiene un ambiente encantador y vistas increíbles. el wifi en áreas públicas es lento.

las escaleras hasta la recepción son un verdadero calvario, y ni hablar de la moqueta sucia de la habitación. esperaba un trato especial por mi presencia, pero aquí me sentí como una huésped cualquiera, sin un bonito detalle ni una sonrisa amable. sólo puedo lamentar no haber escrito una buena crítica, pero lo merecen.

encantadora experiencia en el corazón del pueblo medieval

La situación del hotel es realmente inmejorable, ya que está justo en el centro del encantador pueblo, a solo unos minutos a pie de la impresionante catedral y de la hermosa capilla del Rosaire, lo que me permitió disfrutar de paseos relajantes por calles medievales llenas de historia y encanto, además de que el personal fue extremadamente amable y las habitaciones estaban muy limpias.

Estuve en este lugar para disfrutar del encantador pueblo de Conques y su impresionante catedral. Lo que más me gustó fue la vista de la abadía que se apreciaba desde la habitación. realmente es un espectáculo. Además, tuve la oportunidad de pasear por las pintorescas calles antes de que llegara el bullicio turístico, lo que hizo la experiencia mucho más acogedora.

La cena en el claustro fue agradable, con ingredientes frescos y bien preparados. Desde la habitación tenía vistas a la abadía, lo que hacía mi estadía aún más especial. Disfruté pasear por el pueblo antes de que llegaran más turistas.

Las escaleras para llegar a la recepción son un reto, y el wi-fi en las áreas públicas es un poco lento.

La terraza del restaurante tiene vistas increíbles.

Tuve una experiencia bastante decepcionante durante mi estancia. Las escaleras para acceder a la recepción fueron un verdadero desafío, especialmente después de un largo viaje. Además, la habitación en la que me alojé tenía una moqueta que parecía necesitar una limpieza profunda y carecía de televisores, lo que resultó ser una gran desventaja en mis momentos de descanso.

volveré

La habitación era súper bonita. Tenía aire acondicionado, ducha, y un montón de comodidades como secador de pelo y un montón de artículos de aseo gratis. La cama cómoda, y la decoración muy acogedora. Un plus fue el ventilador para el calor. Pasamos un rato agradable en el spa también.

Me ha sorprendido para bien

Un hotel encantador con un ambiente romántico y vistas a la basílica. Las habitaciones son tranquilas y bien decoradas, perfectas para descansar. La cena en el claustro fue deliciosa, con ingredientes de calidad. Sin duda, un lugar que vale la pena visitar para disfrutar de la belleza del entorno.

Es un hotel encantador con un ambiente romántico y un restaurante en la terraza que ofrece una experiencia culinaria muy agradable, además de un tranquilo patio trasero para relajarse.

recomiendo este lugar insistentemente for una escala rápida

Encantador hotel, excelente ubicación, ya que está cerca de la catedral y permite disfrutar de un paseo por las encantadoras calles del pueblo. además, la habitación ofreció vistas impresionantes y se agradeció la disponibilidad de botellas de agua y un ventilador para el calor.

Nada en absoluto de lo que quejarse.

El entorno es simplemente encantador, muy cerca de la impresionante catedral. La habitación era amplia y cómoda, con vistas espectaculares. Almorzar en el restaurante del hotel fue un momento inolvidable, la comida estuvo deliciosa y los ingredientes eran de buena calidad.

El acceso al hotel puede ser complicado por las escaleras, especialmente si llevas maletas grandes. Además, no había televisión en la habitación, lo que podría ser un inconveniente para algunos.

Ubicació immillorable al centre del poble. Habitació còmoda amb bones vistes. Malgrat que el wifi és una mica lent i no hi ha tele a l'habitació, l'ambient és acollidor i la terrassa del restaurant és un encant.

encanto y comodidad

La habitación era tranquila y bien decorada, lo que facilitó un buen descanso. Me impresionó la atención del personal, que fue amable y servicial, especialmente el chico que nos recibió. La cena en la terraza fue deliciosa, y el ambiente era muy acogedor.

Sin embargo, el acceso al hotel puede ser un reto debido a las escaleras.